lunes, 17 de febrero de 2014

Yo me masturbo, tu te masturbas, nosotros nos masturbamos.....

Las mujeres no se masturban” ERROR. Lo hacen, igual que los hombres pero parece ser que esta feo contarlo, razones las cuales nosotras desconocemos.

El sexo es libre y placentero, solo o acompañado tanto para hombres como para mujeres.

Y para eso estamos nosotras, para hablar de sexo. Sin que nos dé ni un poquito de miedo. 

Y hoy hablamos de masturbarse (visión femenina ofcourse)

NOTA MENTAL: Necesitamos un colaborador hombre para hablar de sexo.



Existen numerosas formas de automanipularnos. Pero no hay que obsesionarse con ellas, si hay algo que te funciona juega tus cartas así, no siempre expermientar es la mejor forma de mejorar.


Nosotras para partir de cero, contaremos con que vuestro nivel de manipuladoras de alimentos en el básico y que con saber sacar la carne de la nevera hacéis la comida igual.

Comenzamos resaltando que la imagen trasmitida por las películas pornográficas de la masturbación femenina es falsa, no hace falta meterse media frutería ahí dentro. El estímulo debe dirigirse al clítoris. Que también quieres estimular la vagina con los dedos o alguna otra cosa adecuada, está bien, añades cosas, pero la vagina como buen musculo hay un momento en el que no dá más de si.

Centrarse en el clítoris
Te centras en el clítoris, se puede utilizar un dedo o varios. Lo frecuente es que, siendo el dedo corazón el guía, se deje acompañar del índice y del anular. Aunque sabrás que hay chicas que lo hacen sólo con el índice o sólo con el dedo anular. Aplicarás un movimiento de vaivén que permitirá que el clítoris esté permanentemente estimulado durante el acto.

Pero si esto es tan fácil ¿cómo introduzco cambios? Tú misma. Abre las piernas si acostumbras a mantenerlas cerradas, o al revés, si sucede lo contrario. Otra variación: si mueves la mano con rapidez, hazlo también con mayor lentitud, o viceversa. Si acostumbras a hacerlo boca arriba,inténtalo boca abajoSi lo haces vestida, desnúdate; si lo haces desnuda, vístete; si lo haces acostada, hazlo de pie o sentada. Si empleas siempre tus manos y lo haces acostada, puedes hacerlo de pie y frotándote contra algo
Hay otras variaciones sencillas de aplicar en casa, ejemplo: el topicazo del chorro de la ducha. Después de ajustar la temperatura, apuntas la parte central que va a mayor presión directamente sobre el clítoris.

Dicho queda que puedes añadir vibradores a tu conjunto de técnicas, aunque no son imprescindibles, pero 
recuerda que el límite es tu propia imaginación.


Y ¿sabes lo mejor?, tocarse es satisfactorio sanisimo.

Ayuda a prevenir el Cáncer, según es tudio probado mayoritariamente en hombres de entre 20 y 50 años. Tambien reduce el riesgo de diabetes tipo 2, asociación que se puede explicar por una mayor salud en general al reducir el insomnio a través de la liberación de hormonas y de la tensión.
La masturbación reduce las infecciones o enfermedades del tracto urinario, como la cistis en mujeres, gracias a que durante la misma se abre el cuello uterino y se libera la mucosidad y fluidos cervicales que suele albergar bacterias.
La masturbación ayuda a reducir síntomas del Síndrome de piernas inquietas, tales como la sensación de hormigueo, calambres, movimientos involuntarios, dolor e inflamación, además de que mejora la calidad de sueño y descanso.

Además, durante esta práctica se liberan endorfinas, las hormonas de la felicidad, que combinadas con las pequeñas dosis de cortisol, mejoran el buen humor y bienestar general, que ayudan a reducir el riesgo de depresión, sobre todo en mujeres.


¿de verdad queréis más razones?

Manos a la obra, señoritas.




Irene Pérez

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